Me he dado cuenta…

Me he dado cuenta de que cuando no estas los días pasan más lentos, las horas se hacen más largas y los minutos sin hablarte, eternos. Me he dado cuenta de que necesito hablar contigo, y hablar de cosas triviales y debates, como que tal ha ido el partido, y de nuestros logros, como la preselección, o el proyecto de tecnología. Me he dado cuenta de que te necesito, y de que necesito hablar contigo. Y si conseguimos quedar algún día, te llevaré una rosa, y nos casaremos. Me he dado cuenta de que te quiero, que me importas, y que me acuerdo de ti todos los días, que el buenos días princesa es algo más que un buenos días, que aunque parezca lo mismo todos los días, me gusta imaginarme que sonríes todos los días al leerlo, y que te hago un poco más feliz. Me he dado cuenta…

Volverá...

No se que decir. Otra vez no. Por favor, que vuelva a salir. Que vuelva a salir por esas puertas blancas, oliendo a nuevo y con una sonrisa en la cara. Ya no me importa el cumpleaños, solo quiero que se ponga bien... No se si podrá soportar otra operación. Cada día está más débil, y el insiste en ir a su huerto, su lugar favorito, a plantar tomates, lechugas, etc... A cada uno le matan sus vicios, sean los que sean. Cada vez me doy más cuenta. Y me doy cuenta cada vez más de que las cosas materiales no importan tanto, que importa más la familia, o quererse, o cuidar de mi hermana, que tener un juego o un ordenador... Pero bueno, el problema es que yo rezaría a alguien, si creyese en algo, pero... De todas formas le pondré una vela a Dios y otra al Diablo, por si acaso... El dios que sea, si es que hay alguno, por favor, que le ayude. Y que vuelva a salir... Una vez más... Pero volverá, porque es inevitable, y no se podrá hacer nada. Y por muchas velas que se enciendan, nadie puede retrasar a la Dama... En fin, solo queda cruzar los dedos y reflexionar, pensar, en lo egoístas que somos y lo mal que nos portamos con las personas que nos quieren. Una de mis frases favoritas es" Somos imperfectos porque pensamos con el cerebro y amamos con el corazón, pero si amásemos con el cerebro y pensásemos con el corazón seríamos perfectos..." Y cada día me doy cuenta de cuanta razón tiene, y la de verdad que hay en esa frase. Y aquí seguimos, a ver si nos dicen algo... En fin... Espero que vuelva...

Felicidad, ¿una mentira más?

-Crees que contar con los ingredientes adecuados es suficiente para que una pareja tenga futuro?

-Si. Y especialmente para que una pareja sea feliz.

-Conoci a una pareja feliz, una familia perfecta. La veia cada dia en el club. Un matrimonio atractivo, rico,ambos excelentes jugando al tenis, con dos hijos estupendos...Y despues, de repente,plaf!

-Que paso?

-Ella le fue infiel

-Seguro que es un chisme que te ha contado alguien...

-No, estoy bastante seguro. Lo engaño conmigo. Me gustaba ver la perfecion de esa familia, su felicidad...Por eso la destrui. Odio la felicidad. Me resulta hipocrita. No soporto a los que siempre estan.sonriendo, a los qie parece que todo les va bien siempre. Mira, mira bien a la gente...

Hombres y mujeres elegantes y rico intercambian  sonrisas, palabras, se saludaban estrechándose la mano, besándose en mejillas. A veces se reian a carcajadas, se contaban algun chiste, pero siempre en voz baja, con.amabilidad y educacion, nunca con una palabra de mas o en un tono mas alto.

-Ahi lo tienes, es un mundo de apariencias...Todos parecen buenos, honestos, tranquilos, sinceros. Y quien sabe cuantos de ellos habran sido infieles, habran robado, habran hecho daño a alguien, habran causado algjn sufrimiento...Y fingen ser felices. Como esa mujer de la familia perfecta: era feliz, lo tenia todo y, sin embargo, en un instante renunció a todo, lo perdió todo, asi...-chasqueó los dedos- Por un simple deseo...

Burbujas...

Nos preocupamos de cosas irrisorias, sin ningún valor, por cosas materiales, por cosas, al fin y al cabo. Deberíamos preocuparnos más por las personas, en vez de por las cosas. Pero entiendo que a la gente le sea más fácil preocuparse de las cosas, porque las cosas no te hacen daño, no te enamoras de ellas, no te hacen nada. Quizá por eso nos gusten tanto, por esa falsa sensación de seguridad que tenemos al saber que no nos van a decir nada que nos haga daño. Porque las personas, sin quererlo, pueden hacerte mucho daño. Y queriendo, más. Nunca estas a salvo de que asalten tu burbuja demasiadas palabras a la vez y explote la burbuja, o que no quepan por el tubo de escape, pero cuanto más hayas sufrido, más resistente será la burbuja, pero llegará un momento en el que la burbuja será tan resistente que ni las buenas palabras podrán pasar. Y el día que eso pase, no podrás confiar en la gente, y para recuperar tu burbuja normal habrá que sacar fuera todo el dolor, olvidarlo, y besar a tu chico en la boca. Y esa mezcla de fuegos artificiales hará explotar la burbuja. Mientras tanto, apóyate en mi, y no dejaré que nadie te haga daño. Bastante te hice yo. No vuelvas dejar te líe un chico, no vuelvas a deprimirte por eso, demuestra que ha aprendido algo. Recuerda que te quiero, princesa.