domingo, 29 de septiembre de 2013

Pura rutina

Y vuelta a empezar. Domingo por la noche, que ganas de ir mañana a clase... Otra semana más, y otra, y otra... y siempre así. ¿Por que no nos levantamos un lunes dispuestos a hacer algo distinto? Porque es más fácil obedecer que pensar por nosotros mismos. Y no debería ser así. Mañana vamos a ir a clase, y vamos a decirle a todo el que nos quiera escuchar que ya estamos hartos. Que los profesores no siempre tienen razón. Que no hay que callar y agachar la cabeza, pensando "cuando acabará la bronca". Lo que hay que hacer es ir mañana a clase, y decir bien alto: NO TIENES RAZÓN. Y punto. Debería ser todo más fácil. Porque cuando discutes con un profesor, vas al tutor, y del tutor al orientador, y del orientador al director, y así. Y cada uno finge estar más escandalizado que el anterior. Hasta que llegas al de arriba, que se ha cansado de fingir y te dice que no tienes ninguna posibilidad, que vuelvas a tu pupitre, agaches la cabeza, pidas perdón al profesor y no molestes más. Y al escribir esto me doy cuenta de que si hay que hacer todo esto para discutir algo, comprendo que la gente se calle. Porque el camino esta lleno de piedras, pero al revés que la canción, aunque sea el camino a seguir, hay que desviarse...

jueves, 26 de septiembre de 2013

Por esas personas maravillosas...

Por esas personas maravillosas... que no te fallan nunca, y siempre quieren hablar contigo. Por esas personas que nunca te han rechazado, aunque las hayas hecho daño, siguen ahí, para estar contigo. Por esas personas que son geniales pero no se lo creen, y piensan que no valen para nada, y para ti son las más importantes. Por esas personas maravillosas que siempre se conectan y te animan, te hacen reír, entienden tus bromas, buscan tus canciones, y las cantan contigo. Por esas personas maravillosas...
Por esas personas que se esconden - y no ven lo maravillosas y perfectas que son para otros.

miércoles, 25 de septiembre de 2013

Racismo...

Hoy voy a hablar del racismo. Eso que todos creemos que hemos superado hasta que conoces a alguien de otro país, o de otro color. Entonces se ve como son las personas. Hay personas que te hacen la vida imposible, y otras que te la hacen más llevadera. Y cuando estés ahí fuera, en el colegio, en tu barrio, y veas que están humillando a alguien por ser extranjero, ponte en su lugar, e intenta ayudarle en vez de mirar para otro lado como siempre se hace. Porque hay personas distintas ahí fuera, y tenemos que aceptarlas como son, con sus defectos, sus despistes, sus cambios de humor. Porque si humillas a alguien por ser diferente, deberías pensar que a lo mejor el diferente eres tú.El racismo hacia otros países -  es la respuesta del hombre ante lo desconocido, lo odiado o lo envidiado.